martes, 17 de mayo de 2011

Dentro, en algún lugar.



Punteaduras de gomosa consistencia .
Canales rectilíneos y vermiformes.
Una luz que ciega.

Persecuciones pasmosas con salidas de emergencia a los lados.

Fases móviles, estacionarias y anexos simplificados para un mejor asentamiento de los conceptos.

Adquiere una presencia prudente e impredecible en sus formas. Es vaivén y caos en dos triángulos opuestos que se deslizan sobre sus propias aristas.

Existen dos planos semicirculares que chocan en un único punto. Y no me dejan dormir. He tenido que salir al balcón para regar la esfera de despropósitos que estaba creciendo en la maceta. 


Ellas trajeron la belleza.
Dejando a un lado la lógica del trígono, nada sigue unas proporciones tan perfectas.

Sólo quedan cenizas y polvo.

Hoy no le temo al fuego.